Como nuevo responsable de la revista Acta Gastroenterológica Latinoamericana, agradezco a la Comisión Directiva de la Sociedad Argentina de Gastroenterología, quien a través de su actual presidente, Ángel Nadales, y de su vicepresidente, Silvia Pedreira, me han propuesto desempeñar esta función de la cual me siento muy honrado y he aceptado con entusiasmo y con gran expectativa.
En noviembre de 2011 con José Luis Fernández desarrollamos juntos un evento cuya finalidad fue destacar, jerarquizar y compartir con todos los socios de la SAGE el I Encuentro de la Revista Acta Gastroenterológica Latinoamericana: “Lo mejor de nuestra revista por sus autores para la comunidad gastroenterológica”. Quizás, y a la distancia, siento que el objetivo aquél no fue exitoso. Insisto y voy por más…
Es mi segunda oportunidad para poder poner todo mi esfuerzo y solicitarle a la comunidad gastroenterológica que publique en ACTA: es gratificante, enriquecedor, permite comunicar y compartir nuestros conocimientos y errores: considero que es una forma de jerarquizar nuestra labor diaria.
A raíz del editorial escrito por su ex-Editor en Jefe en el último número (AGL 2015; 45: 7), traigo a colación el poema de Antonio Machado (para hacer lo que tanto le gusta a José): “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”. Este es un nuevo desafío profesional que debo recorrer con la obligación de prestarle atención a la continuidad del poema cuando dice: “y al volver la vista atrás”; por lo tanto, debo recoger la mirada muy crítica que en dicho editorial ha expresado su autor para tratar de revertir las grandes dificultades por él padecidas. Elijo trabajar con los pies sobre la tierra, prefiero no subirme al barco, que si bien ha llegado a buen puerto, me parece más seguro caminar, hacer ruido y no navegar en aguas turbulentas para poder evitar las tormentas no deseadas.
Considero que cuento con algunas ventajas fundamentales que pueden facilitar mi tarea: el nuevo Comité Editorial, integrado por Carolina Bolino, Josefina Etchevers, Jorge Olmos, Martín Olmos y Lisandro Pereyra, destacados amigos de la SAGE que por su trayectoria garantizan trabajo intenso e idoneidad profesional (les expreso mi agradecimiento por haber aceptado este compromiso). Además, de contar con la continuidad de Mariela como asistente y Raúl como editor, que conocen muy bien y saben de qué se trata el arduo trabajo que nos espera, tengo la experiencia de ex-integrantes de Comités Editoriales de ACTA que aún hoy permanecen a mi lado (Julio Bai y Rodolfo Corti), y la colaboración continua y siempre eficiente, en el área administrativa de la SAGE, que brindan Bárbara Annun y Nora Muñoz.
Asimismo, solicitaré la colaboración de especialistas nacionales e internacionales de reconocida experiencia para que aporten sus conocimientos, la crítica experta, y nos ayuden en el análisis de los manuscritos para enriquecer y jerarquizar las publicaciones.
Un aspecto para destacar será la actividad que propongo generar a partir de la página Web. La consigna es la información constante con lectura on line de todos los manuscritos: los publicados y en prensa con sus distintos formatos (originales, casos clínicos, imágenes, videos, conferencias). El objetivo es proponer una herramienta de difusión y estímulo como vehículo moderno de capacitación e intercambio de los jóvenes especialistas. Además, otra tarea muy importante será atraer a la industria farmacéutica para que nos ayude con los recursos necesarios, convencerlos de que apoyar una revista científica a la larga tiene sus ventajas y prestigia a quien lo realiza.
Solicito la ayuda de todos los gastroenterólogos, hepatólogos y endoscopistas latinoamericanos. Ahora queda en todos nosotros estimular a nuestros jóvenes profesionales en investigación para jerarquizar el conocimiento, así podremos continuar con el crecimiento de ACTA como reflejo de nuestra actividad profesional integral, participativa y multidisciplinaria.
Por último, ajustado a las circunstancias y para expresar un sincero agradecimiento por el trabajo realizado al ex-Editor en Jefe de la Revista ACTA, solamente dos palabras son válidas: gracias José.
Caminantes, vamos a trabajar…
Horacio Vázquez
Acta Gastroenterol Latinoam 2015;45(2):106